Una rutina de ejercicios adecuada y una dieta saludable contribuyen a un estómago más plano y delgado.
Golpear el gimnasio regularmente ayuda a mantener el abdomen en forma y el corte. El ejercicio cardiovascular, una dieta saludable y ejercicios abdominales trabajan juntos para darle un abdomen más delgado y en forma; Sin embargo, la técnica incorrecta y los regimientos de entrenamiento ineficaces pueden hacer que su estómago parezca incluso más grande que antes. Desterrar esa protuberancia abdominal no deseada al corregir su forma y volver a evaluar su rutina de ejercicios.
Postura y forma
La postura torcida empuja los músculos de los abdominales hacia afuera, haciéndolos parecer más grandes. Sentarse derecho con el ombligo hacia adentro le da a su estómago una apariencia más plana mientras fortalece sus músculos abdominales. Los hombros caídos y dejando que los músculos de su estómago se relajen mientras realiza abdominales, sentadillas y otros ejercicios abdominales también entrenan a sus músculos para que se desarrollen hacia afuera, aumentando su apariencia abultada. Mantenga los abdominales enganchados llevando el ombligo hacia la columna vertebral mientras hace ejercicio.
Grasa Corporal
Los crujidos sin fin por sí solos no harán que sus pantalones quepan mejor. Desarrollar los músculos abdominales sin quemar la grasa encima de ellos puede hacer que su estómago se vea más grande que delgado. Mantenga una dieta saludable y dedique 30 minutos diarios a la actividad cardiovascular, como caminar, correr o andar en bicicleta para ayudar a reducir el porcentaje general de grasa corporal y aplanar el estómago con el tiempo.
Rutina de entrenamiento
Ganar la batalla del vientre significa cambiar tu rutina de ejercicios. Abdominales y sentadillas a menudo solo trabajan uno o dos músculos, mientras que un programa de entrenamiento central fortalece sus oblicuos internos y externos, los músculos de la espalda y los glúteos, así como sus abdominales. Pruebe métodos como Pilates y ejercicios de resistencia ponderada junto con ejercicios cardiovasculares para quemar grasa. En caso de duda, consulte a un entrenador personal para determinar la rutina de entrenamiento que mejor se adapte a sus objetivos.
Problemas digestivos
Un vientre hinchado puede ser un signo de problemas digestivos u otros problemas internos. El estreñimiento, el síndrome del intestino irritable y las fluctuaciones hormonales suelen causar abultamiento en el estómago. No beber suficiente antes y después de sus entrenamientos puede hacer que su cuerpo retenga líquido, lo que contribuye a la hinchazón del vientre. Hacer ejercicio demasiado pronto después de comer puede ralentizar la digestión, haciendo que su estómago se sienta cada vez más pesado. Si su panza abdominal está acompañada de náuseas o dolor, consulte a su médico para descartar una sensibilidad a los alimentos, hernia u otra preocupación médica.