Los pediatras deben poder comunicarse bien con los niños.
Los pediatras realizan servicios médicos básicos y avanzados para niños desde el nacimiento hasta los primeros años de la edad adulta. Estos doctores tienen una oportunidad única de construir el respeto y la amistad de los padres mientras tratan las enfermedades de sus preciosos hijos. Si bien esta posición paga muy bien y es muy apreciada por muchos, sin duda existen dificultades y desafíos para realizar estos deberes fundamentales. En particular, las condiciones de trabajo de un pediatra tienen puntos buenos y malos.
Ubicación
Los pediatras, especialistas que necesitan una gran concentración de clientes potenciales debido a la naturaleza del puesto, a menudo establecen una práctica en un área urbana. El área metropolitana de la ciudad de Nueva York, por ejemplo, lideró la nación en 2012 con 1700 pediatras. Es común que estos médicos compartan una consulta con un grupo de pediatras o especialistas generales. Algunos pediatras establecen su práctica dentro de un hospital general o infantil. Pocos pediatras practican en áreas rurales, a menos que tengan un horario de rotación dentro de una práctica médica general.
Office Dynamics
Las clínicas pediátricas están diseñadas para satisfacer las necesidades médicas y emocionales de niños y adultos jóvenes. La configuración de la oficina generalmente tendrá decoraciones brillantes y coloridas. La oficina a menudo tendrá una sección secuestrada para que los niños enfermos esperen, lejos de otra sección para niños sanos que esperan una buena visita. Puede haber televisores, videojuegos y libros o juguetes en estas habitaciones para mantener a los niños entretenidos y para ayudar a aliviar su ansiedad de acudir a la oficina. Estos factores junto con la propensión a que los niños enfermos o lastimados lloren a menudo resultan en una oficina muy ruidosa.
Día de trabajo típico
Los pediatras a menudo trabajan 60 horas semanales o más, conociendo niños y padres y diagnosticando enfermedades. Por lo general, están de guardia en todo momento para ayudar en las visitas al hospital de emergencia o preoperatorias para sus clientes establecidos, aunque pueden hacer arreglos con colegas dentro de su consultorio para realizar esto en forma rotativa. Los pediatras suelen tener un programa completo de pacientes durante todo el día, viéndolos seguidos con poco tiempo entre ellos. Tienen tiempo para revisar los cuadros y las condiciones de investigación y los medicamentos según sea necesario entre los pacientes y también realizarán parte de esta preparación antes y después de sus horas de oficina. Es común ver niños con lesiones importantes que van desde cortes y magulladuras hasta huesos rotos. También hay exposición frecuente al fluido corporal de los niños enfermos y lesionados a lo largo de un día de trabajo.
Otras consideraciones
Trabajar con niños y sus padres puede ser un desafío estresante. Los niños a menudo se resisten a los procedimientos médicos y toman medicamentos. Los pediatras deben desarrollar habilidades para hablar con los niños y sus padres para diagnosticar y tratar sus enfermedades. Los conflictos con padres sobreprotectores que exigen ciertos tratamientos, como la prescripción de antibióticos, pueden provocar ansiedad. En una clínica pequeña, ayudar con el papeleo, la facturación y las cobranzas puede convertirse en una parte considerable del trabajo. El cumplimiento de las reglamentaciones federales relacionadas con la documentación de privacidad y documentación también puede causar estrés laboral. Buscar un equilibrio entre buscar tratamientos apropiados y útiles y el temor a un litigio también puede ser un desafío considerable.