Los perfusionistas dirigen una máquina que circula y oxigena la sangre, lo que le permite evitar el corazón durante la cirugía.
Durante ciertos procedimientos médicos, como la cirugía a corazón abierto, los médicos necesitan que se detenga el corazón del paciente y que no exista sangre para operar. Los perfusionistas cardiovasculares, que trabajan codo con codo con cirujanos y anestesiólogos como miembros críticos de los equipos quirúrgicos, intervienen para el corazón y los pulmones, dirigiendo la compleja máquina que mantiene a los pacientes vivos circulando y oxigenando su sangre mientras el corazón está fuera de servicio.
Cuarto de operaciones
El perfusionista llega a la sala de operaciones antes de la cirugía para configurar la máquina cardiopulmonar y el equipo de prueba, asegurando que todo funcione correctamente. Durante la cirugía, administrará medicamentos para detener el corazón de un paciente y controlar la máquina cardiopulmonar durante el procedimiento, que puede durar horas, asegurándose de que la presión arterial y el flujo sanguíneo se mantengan en los niveles adecuados mientras el médico trabaja. . El término "cirugía de derivación cardiaca" se refiere al uso de esta máquina compleja: la sangre elude al corazón, en lugar de moverse a través de la máquina cardiopulmonar, que también agrega oxígeno y elimina el dióxido de carbono.
Pre y post operación
Este trabajo no comienza y termina en la sala de operaciones. Los perfusionistas a veces también brindan atención continua al paciente antes y después de la cirugía. Pueden ser responsables de reforzar la circulación y usar equipo para estabilizar un corazón defectuoso hasta que esté listo para la cirugía. Después de la cirugía, mientras el corazón está recuperando el músculo para funcionar por sí solo, un perfusionista a veces le administrará medicamentos y productos sanguíneos para ayudarlo a funcionar. Como muchos profesionales de la medicina, los perfusionistas pueden ser llamados a trabajar a cualquier hora del día o de la noche.
Administración Global
Fuera de la sala de operaciones, es deber de un perfusionista asegurarse de que tenga los suministros y el personal de apoyo adecuados para hacer su trabajo. Ella realiza verificaciones de calidad para garantizar que todo el equipo esté limpio, funcionando correctamente y listo para usar. Esto significa inventariar y ordenar productos de sangre, medicamentos y otros suministros. También contrata y supervisa a los técnicos de soporte según sea necesario, investiga nuevas tecnologías para mantener el hospital al día y colabora con los médicos para decidir qué equipo nuevo debe solicitarse.
Educación y Capacitación
Necesitará ingenio rápido, un lapso de atención inquebrantable, nervios sólidos y excelentes habilidades con las personas para prosperar en este trabajo de alta presión. Durante la cirugía, la perfusionista tiene la vida de la paciente en sus manos. La comunicación fácil y efectiva con todo el equipo quirúrgico es una necesidad. Necesita los ojos para captar cambios a veces sutiles y la confianza para reaccionar rápidamente. Planee pasar al menos un año después de la escuela de pregrado para completar una certificación de post-bachillerato y pasar a las juntas nacionales. Muchos perfusionistas obtienen títulos de maestría antes de comenzar a practicar.